enero 30, 2009

Para no variar... vacaciones!

Ya he comentado hasta el cansancio que en éstos lares las vacaciones escolares suceden cada estación del año, además de las tradicionales navideñas. Hoy comenzaron en mi rancho las de invierno porque no en todos los estados (cantones) suizos se tienen al mismo tiempo, en ésto los chocolateros se pintan solos por aquello de la perfección, la diferencia entre unos y otros se hace con el fin de que los lugares para vacacionar no se abarroten de peregrinos y... no sea que alguien no vaya alcanzar lugar, ja!. A parte de las fechas también el nombre que se les dá varía, por ejemplo aquí se llaman Vacaciones para esquiar (Skiferien), en otros les dicen Vacaciones de Carnaval (Fastnachtsferien) y en otros simplemente Vacaciones de Invierno (Winterferien).

Nosotros nunca habíamos salido en éstas fechas ya que por prescripción médica a mi maridis le está prohibido volver a esquiar, pero la cosa es que a partir del cuarto o quinto grado de primaria las escuelas organizan un período de viaje para esquiar con los alumnos y los maestros pero sin los padres (madre santa! faltan dos años para que mi bebé se me vaya solo y ya siento ñáñaras) así que, tratando de evitar un poco problemas futuros de mis peques por su ignorancia en el arte del ski, le sugerí a mi media naranja que ya era hora que los niños tomaran clases 'in situ' y de manera formal. Así, los huercos irán bien hachas, cuando les toque.

Mañana salimos muy tempranito, en tren, hacia los tan mentados Alpes Suizos para comenzar ésta aventurita. Luegos les reseñaré lo acontecido, si Diosito me lo permite, en una semana. A mis tres lectoras les vuelvo a pedir paciencia por esta nueva ausencia, más que voluntaria.

Bis Bald!

enero 29, 2009

El (des)orden de la letras en el teclado

Ayer leí un post en donde se mencionaba la aparición en el mercado de un teclado en el que las letras están distribuídas en perfecto orden alfabético, situación que le da su nombre 'Teclado ABCDEF'. De ahí me surgió la duda del por qué del orden de los teclados convencionales, ya que confesé que soy muy pensona (del verbo 'notengoquehacer'). Pues bien, la cosa es tan simple como que en la época que se inventó la máquina de escribir mecánica (precursora de la computadora de nuestros tiempos) en el siglo XIX, se diseñó originalmente con un teclado ABCDEF pero surgió un inconveniente: debido a que éstas máquinas funcionban mediante martillos con el inverso de las letras grabadas en su cabeza que al golpear un tipo de papel a través de una cinta con tinta marcaba la letra, el movimiento de las teclas era accionado por la presión de los dedos y dentro del aparato tendian mucho a chocar y a trabarse las palancas de las teclas cercanas que presionaban.

Cristopher Latham (su inventor) trato de mejorar el diseño de la máquina para eliminar este problema. Lo que hizo fue alterar el orden de las teclas para separar los tipos que se usaban juntos con más frecuencia. Para eso hizó un estudio de frecuencia de pares de letras, es decir, los pares que mas se utilizaban y que obviamente se esncontraban juntos. El resultado fue un orden QWERTY (por las cinco primeras letras de la primera línea), el cual todos conocemos actualmente que, aunque no terminó totalmente con el problema, si lo redujo. El teclado que diseñó Latham se mantuvo con los modelos que surgieron después y se difundió con tanto éxito por todo el mundo, que cuando surgieron las maquinas de escribir eléctricas y las computadoras, el teclado QWERTY se sigió usando.

En 1932 un invetor llamado Dvorak diseñó una disposición del teclado que permite escribir más rápidamente. En ese teclado las vocales estan en el centro a la izquierda y las consonantes mas usadas a la derecha. Esto hace que la escritura en ese teclado sea más simple y descansado.
Se conocen otros tipos de teclado en el que el orden de las letras más bien tiene que ver con el idioma en el que se utiliza, pero que están basados mayormente del QWERTY, en los que solo cambian de posición algunas letras y/o símbolos:

AZERTY: Francia y Bélgica


QWERTZ: Suiza (parte alemana y francesa)


Esta fué la lección de hoy de "cuando tu musa de abandone, dale una friega a la Wiki".

Saluditos!

enero 28, 2009

Regalazo

Kalimba es otro de mis ídolos mexicanos al que sigo precisamente desde que comenzó su carrera de solista después de la desaparición del grupo al que perteneció desde pequeñito: OV7. Tengo que confesar que debido a su participación en el Show de los Sueños (o de las pesadillas?), no me perdía éste programa porque era simplemente una delicia verlo bailar cualquier son que le pusieran, mucho más escucharle cantar cosas tan extrañas en su voz como éxitos de José José o José Alfredo Jiménez (algún karma tendrá el chocolatito ésto con los Pepes). Pero lo suyo es el rock, del bueno, aunque lo comparen con Lenny Kravitz y le anuncien como su versión Región 4.

Por éstos rumbos no había salido su último álbum, por eso no lo había comprado, pero oh sorpresa que mi amigocha Engel Dafnè me lo trajo de sus últimas vacaciones en el DFctuoso. La cosa es que el disco me llegó con premio: un autógrafo del muchacho dedicado a mi nombre, vientos!. Gracias amigocha!. Aqui lo presumo:



No cabe duda que mis amigas saben cómo hacerme feliz!. Eso, que en estos tiempos escasea mucho, se agradece.

Au revoir!

enero 27, 2009

Cargando el venado


Estaba un hombre a la orilla del camino sentado en una piedra, bajo la sombra de un frondoso huanacaxtle. Se le miraba triste, meditabundo, cabizbajo; casi casi a punto de soltar el llanto. Así lo encontró su compadre y amigo de toda la vida quien, acongojado al verlo en tales fachas, le preguntó el motivo, causa o razón que ocasionaba que él se encontrara en situación tan deprimente.

- Ay! Compadre -contestó el interpelado- ¡tu comadre! ¡tu comadre!. Esta noche la mato o la suicido, pero de que se muere, se muere.

- No la amueles compadre, mejor platícame, porqué la quieres matar, a lo mejor te puedo ayudar a encontrar una mejor solución al problema.


El compadre, después de limpiarse sus ojos todos llorosos y su nariz moquienta, empezó con su relato.

- Mira compadre, tú sabes que somos muy pobres y en tu humilde casa la única forma de acompañar los frijoles es con un pedazo de carne que tengo que conseguir yendo de cacería al monte. Me tengo que ir con mi vieja escopeta, pasar varios días de sufrimiento y penalidades, salvándome de milagro de los peligros del monte: esquivando víboras, al tigre y la onza, soportar la terrible comezón que me producen las guiñas, garrapatas y piquetes de moscos y por si esto fuera poco, aguantar cómo me calaba hasta los huesos el frío y la soledad de las noches. Luego por fin, si la suerte me socorre y logro cazar un venado, todavía tengo que cargarlo hasta el rancho y subir la cuesta de la loma donde está mi casa. Todavía no alcanzo resuello cuando aparece mi señora con el cuchillo en la mano e inmediatamente empieza a repartir el venado entre vecinos y familiares. Que una pierna pa' doña Juana, que otra pa' doña Cleo, que este lomito pa' mi mamá, que esto pa'llá, que esto pa'cá y a los dos o tres días allí va tu tonto otra vez de cacería. ¡Pero ya me cansé y esta noche mínimo las desmechoneo!


El compadre de aquél iracundo desdichado, después de meditar un momento le dio la solución:

- Invita a tu mujer a cargar el venado.

- ¿¡Qué!?

- Sí, sí. Mira. Nomás no le digas las madrizas que te pones para cargar el venado. Mejor píntasela bonito. No le hables de las espinas ni los peligros, ni del frío ni el calor. Dile que la invitas a la cacería para que disfrute de los bellos paisajes, del esplendor de las estrellas que te cobijan en la noche, de los manantiales cristalinos que reflejarían románticamente sus imágenes, de sus exquisitas aguas, del aire fresco del monte, lleno de oxígeno, de la graciosa manera en que camina el venado, como si fuera un bailarín de ballet, el dulce canto de los grillos y los pajarillos silvestres, en fin.


El compadre siguió el consejo. Por supuesto la convenció. La mujer, entusiasmada, se fue con la falda larga hasta el tobillo. Al cruzar el primer "aguamal" se redujo a minifalda porque la prenda quedó desgarrada entre las púas. La blusa le quedó toda "chiruda". El calzado se le rompió por los difíciles caminos y las piedras y las espinas la hicieron sangrar. Las "guinas" y "guachaporis" los traía por todo el cuerpo. El sol le quemó la piel. El pelo se le maltrató: le quedó tieso y desparramado como estropajo. Las manos le quedaron encallecidas al abrirse paso entre el espeso monte. Toda chamagosa, estuvo a punto de sufrir un infarto al toparse con una enorme víbora. Muerta de hambre, su imagen parecía sacada de un cuento de ultratumba.

Por fin, después de tantos martirios, un día encontraron al venado. Ella tuvo que contener el aliento y el hombre sigiloso, con la astucia y agilidad de un gato, se acercó a su presa y con la mirada de un lince localizó el blanco justo para liquidar al escurridizo animal. ¡Bang!. Y el venado había muerto. La mujer no cabía de júbilo pensando que su sufrimiento había terminado, pero no era así.

- Ahora, mi amor, quiero que cargues el venado para que veas lo bonito que se siente- le dijo el hombre masticando rabiosamente cada una de sus palabras.


La mujer casi se desmaya ante la desconocida mirada asesina de su marido, pero ante la desesperación por regresar a su hogar no tuvo aliento ni para replicar y cargó el venado hasta su casa cruzando veredas y montañas. Despatolada, con las piernas abiertas, jadeando y casi muerta, a punto de tronarle el corazón, llegó y depositó el animal en la sala de su casa.

Los niños y sus amiguitos, hijos de los vecinos, salieron a recibir a sus papás cazadores y acostumbrados a la repartición, le dijeron a su mamá con alegría:

- Mamá, apúrate a repartir el venado porque la mamá de Pepito ya está desesperada.

- ¿Qué pedazo le llevo a mi tía?, le dijo otro.


La señora, tirada en el piso, hizo un esfuerzo sobrehumano para levantar la cabeza y con los ojos inyectados de sangre volteó a ver a los niños y agarrando aire hasta por las orejas, les gritó:

- Este venado no me lo toca nadie y tú Pepito, ve y dile a tu mamá que vaya mucho a *&%$·)*")!#.


REFLEXIÓN

Para valorar el esfuerzo ajeno y respetar en su real dimensión el trabajo de los demás, todos debemos aprender a "cargar el venado". La experiencia adquirida con el paso de los años nos ha enseñado que solo se valora aquello que se ha adquirido como resultado de nuestro trabajo, que solo cuidamos aquello que nos ha costado esfuerzo, sudor y sacrificio.

enero 26, 2009

Nade escapa del maratón Gpe-Reyes

Mi maridis opina que se ve mejor en la primera foto, que es la más actual (he ahí el por qué se casó conmigo, ja ja ja, tiene gustos estilo Botero el pobre!), dice que así se ve saludable. Pero por supuesto que todas querríamos estar como en la segunda imagen (de algun tiempo atrás).


A mi me parece que se ve bien en las dos, cuestión de gustos.