agosto 12, 2008

Calma aparente


Me comentaba un amigo regio que trabaja de taxista, que en una ocasión durante uno de sus trayectos por la calle Revolución a la altura del Casino R, lo paró una revisión antialcohólica ya bien entrada la noche. Mientras hacía lo suyo con el agente de tránsito, en el carril de al lado se detuvo una camioneta de donde se podía ver claramente cómo sobresalía por la ventanilla del vehículo el pico de lo que era un arma de fuego de alto calibre, detrás de éste vehículo había otros dos más por el estilo. A mi amigo le quiso dar un soponcio porque pensó que ahí mismo comenazaría la tronadera a la que ya están acostumbrando mis coterráneos, comenzó a sudar y hasta se le paralizaron las piernas en cuestión de segundos.

Los ocupantes de la camioneta, un tanto sonrientes, se dirigieron al agente y también mandaron llamar al que le tocó a mi amigo para decirles con voz suave pero enérgica:

"Miren cabrones, somos ***** (miembros de un grupo armado llamado con la última letra del alfabeto) y vamos a pasar de nuevo en una hora, si para entonces no se han ido a chingar su madre, mañana salen en las noticias y sin cabeza".


Sin decir más, las camionetas salieron rayando llanta y sus ocupantes muertos de risa. Acto seguido los agentes de tránsito se olvidaron de los automovilistas que seguían ahí esperando para ser controlados y, como en las películas de Charles Chaplin (hechos la cochinilla), comenzaron a levantar los conos naranjas con los que delimitan los carriles para la inspección.

Así como ésta, me contó otras historias más que, gracias a su oficio, ha tenido que chutarse en silencio. Dios lo agarre confesado.

Esto me hizo recordar a mi hermano mayor, ya fallecido, que también fué taxista. Una de sus peores anécdotas antes de dejar de trabajar fué llevar a un muchacho que se subió en el asiento delantero junto a él y, poniendo una pistola en medio de los dos después de cortar cartucho, le ordenó que lo llevara a la Estanzuela. Ni cómo negarse, lo llevó hasta un camino de terracería del que luego siguieron por una brecha entre matorrales en una zona totalmente desierta. Los nervios le hicieron aprenderse de memoria instantáneamente el camino para poder regresar a la civilización desde aquella tierra de nadie (si acaso salía vivo, pensó él).Nomás llegar a su destino el hombre bajó del auto, le pagó con un billete grande sin esperar el vuelto y le ordeó retirarse lo más rápido posible. El lugar era una casa construída con toda la mano que más bien parecía una fortaleza, recordó mi hermano que tardó un buen tiempo en reponerse del susto que lo hizo temer por su vida.

Alguna vez alguien de mi familia me comentaba que tal vez sería éste episodio el que hizo a mi hermano contraer la terrible enfermedad que lo llevó a la muerte años después, pero eso nadie podremos saberlo. Lo que sí es un hecho, es la calma aparente que ahora se vive en Monterrey donde el alto al fuego parece más que sospechoso. Unos dicen que por fin éste territorio ha sido ganado por una de las dos bandas dedicadas a la droga que se lo disputaban hasta hace unos meses, otros aseguran que los criminales por fin pactaron con los gobernantes. El caso es que en los medios internacionales y los más optimistas mexicanos, se habla del buen trabajo que Felipe Calderón está haciendo en su lucha contra el narcotráfico... ¿será melón, o será sandía?. Mientras, víctimas inocentes siguen exponiéndose a peligros como éste, por el solo hecho de salir de casa traer el sustento a la familia.

A mi ésta calma aparente me dá más miedo.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

La Asociación Nacional de Centros Cambiarios y Transmisores de Dinero, AC invita a su XI Convención

“Importancia del Sector de Cambios en la Economia”

Que se realizará del 30 de octubre al 1º de noviembre del 2008 en la cd de Zacatecas.

Mayores informes: http://www.ancec-td.com.mx

yomero dijo...

Si alguna vez nuestras autoridades dijeron que en navidad había un pacto de no agresión y por eso no esperaban muchos muertitos, yo imagino que andan de vacaciones... jeje... :(

en realidad no sabe uno ya que pensar

kerubin@ dijo...

Mask: No le hagas, no vaya a ser que te lean y vuelvan desde donde andan. Saludos mi estimado, me quedé con las ganas de conocerte, ahí pa'lotra.

Anónimo dijo...

Es que ahora andan trabajando en Aguascalientes ahi andan gruesos, y pensar que era una zona tan tranquila ahora es un caos, mira lo que han hecho de ti mi pais, mi pais.. snifz..

Anónimo dijo...

En navidad que estuve en mi casa, mi mamá me contó unas historias de terror que habían sucedido en mi ausencia, lo que me contaba me parecía una película, me hablaba de un país que no era el mío, el que dejé hace 5 años.....en ese entonces el mundo estaba tan lejos de Victoria :'(


Saludos desde Sevilla.

yo dijo...

pues Keru, hasta mi pueblo, que nadie lo conoce ;P ya llegaron estos "señores". HAce poco hubo una balacera terrible que salió en noticias nacionales. En un lugar donde jamás había sucedido nada especial!. Mi mamá me dijo que los rumores eran que se están desplazando por nuevos rumbos.
Ojalá y esto se termine pronto. Es imposible vivir con la zozobra.
te mando un abrazo

kerubin@ dijo...

@ Anónimo: Asi empezó Monterrey hasta que se convirtió en lo que es ahora. Malo el cuento.

@ Norma: Y así sucesivamente, éstos malandros no estarán contentos hasta no tener a todo México en su poder. Será posible?

@ Ivi: El otro día escuché una frase que me dió risa e indignación al mismo tiempo en relación a lo que dices "ahora se está muriendo gente que antes no se moría". Es para dar risa por lo utópico de la frase, pero precisamente se refería a que ésta lacra está llegando a todos los rincones. Saluditos!