junio 14, 2010

Distancia emocional


Sigo con el tema de la operación de mi suegra. Nos avisaron desde hace unos días que será mañana martes y de inmediato me avoqué a tomar cartas en el asunto. Le comenté al maridis mi idea de hablar con las maestras de Chris y Zara para pedirles permiso de ausentarse de la escuela ese día, con el fin de llevarle un poco de ánimo antes de entrar en quirófano.

Recordé aquel día tan emotivo en que murió mi padre, en el que todos sus hijos estuvimos con él para despedirnos y que lo hizo a él tan feliz. Imaginé que tal vez para mi suegra, ante la incertidumbre de lo que pasaría en la mesa de operaciones, sería un regalo el poder ver a su familia rodeándola de cariño y buena vibra para afrontar ese trago tan amargo.

En el peor de los casos, para reconciliarse con la vida poniendo orden y paz a lo que pudieran ser sus últimos momentos; ojalá Dios no lo permita, pero había que ser realistas.

Redacté una carta para los maestros de mis hijos que deberían de presentar hoy por lo mañana para justificar con tiempo su ausencia escolar, la teníamos preparada desde ayer domingo por la mañana antes de ir a visitar a la abuelita al hospital como cada fin de semana.

Cuando llegamos al cuarto, me sorprendió mucho ver el estado en el que se encontraba, solo una semana antes era todavía la de siempre y ayer parecía haber envejecido muchísimo. Hablaba un poco raro, como en cámara lenta, y sonreía por todo. Ella misma nos dijo que eran los medicamentos tan fuertes contra el dolor de la espalda, los que la tenían asi de groovy.

Los niños permanecieron quietos y calladitos, más de lo normal, creo que notaron lo mismo que yo y prefirieron ser prudentes. Solo el maridis y yo le hacíamos plática, disimulando la angustia que nos causaba verla tan demacrada.

En un momento dado, fué mi media naranja quien le comentó sobre los planes de ir a visitarla antes de la operación. Inmediatamente ella reaccionó diciendo que 'no era necesario', nos dió muchas razones de tan poco peso que enseguida nos dimos cuenta que no nos quería ver ahí.

Me dolió mucho, pensaba en la oportunidad que la vida le da para estar con su familia en un momento tan trascendental, pero creo que de nuevo entra aquí el choque cultural y visto lo visto, nuestras ideas y sentimientos siguen estando en su mismo lugar: muy lejos unos de las otros. Bajito al oído, le dijo a mi maridis "quiero estar sola con mi miedo, déjenme sola".

Me caló también por mis hijos, que han estado tan preocupados por su salud y tan al pendiente de ella, no solo en estas circunstancias... siempre! De hecho fueron ellos los que me pidieron que los llevara. No me quedó de otra y tuve que respetar sus deseos, opté por callar como se me ha venido haciendo costumbre.

Antes de salir, le di la mano y le deseé suerte, pero ella me jaló del brazo y me acercó para darme un beso. Tuvimos que esperar un momento en la puerta del elevador a mi marido, cuando llegó nos rompió el corazón a mis hijos y a mi porque llegó llorando muy afligido. Afuera llovía a cántaros, el cielo gris y los cuatro estábamos tomados de la mano sin decir nada, en la entrada del edificio.

Una vez más calmado, nos pidió a los niños y a mí que si en día él llegara a estar en una situación parecida, por favor no lo dejáramos solo. Zara sollozaba, Christof le respondió "yo voy a estar contigo de día y de noche, como tu has estado siempre conmigo papi, tu no vas a tener miedo porque nosotros vamos a estar siempre contigo".

En el camino a casa, los invité un helado a los tres y el sentimiendo fué menguando poco a poco, tal vez en apariencia. En casa, rompí las cartas a los maestros y hoy solo nos queda rezar para que sea lo que Dios quiera que sea su voluntad. Si pueden orar también, aunque sea por una desconocida, se los agradeceré en el alma.

Auf Wiedersehen!

6 comentarios:

NN dijo...

Muy triste.

Nancy dijo...

Claro que estoy contigo y con la señora madre de tu maridis, le pediré a mi mamá que hagamos oración por ella Keru, le mandamos desde acá mucha fuerza y los mejores deseos para que salga con bien de la operación.

Un abrazo para toda la familia, estamos con ustedes.

Nancy

Val dijo...

Keru, desde aqui mis oraciones por la salud de tu suegra y por ti y tu familia, esperando que Dios les de valor, fortaleza y resigacion.
Un abrazo desde el fondo de mi corazon.
Val.

Anónimo dijo...

Keru querida amiga

Desde el fondo del corazón, deseo que todo salga bien, que sea la voluntad de Dios la que guíe todo en sus vidas, porque Él es sabio y pone todo en su lugar. Espero que sea una nueva oportunidad para tu suegra de vivir feliz su vida al lado de ustedes, los seres amados por ella.
Te mando fuerza amiga.

Bebita

Nelly dijo...

No se si salio mi comentario anterior o no lo mande ya se me va la onda. Pero lo vuelvo a repetir. Todo saldra bien, tu suegra esta en mis oraciones. Y que la mano de Dios guie la mano de los cirujanos.

HOMERO dijo...

ANIMO! Dificil tu historia pero debemos ser fuertes

saludos