julio 09, 2009

Más imprudencias

El otro día estacionaba el coche en el garage y luego de apagar el motor me hice loca un rato recogiendo basuritas mientras terminaba la canción que venía escuchando. De reojo, vi que uno de los vecinos se había acercado por el lado de la calle, pero pensé que tal vez andaría detrás de uno de sus hijos como la mayoría de las veces lo he visto. Vive a dos casas de la mía, él y su esposa son los más jóvenes del vecindario, calculo que no pasarán de los 25 años, y tienen dos niños de uno y tres años más o menos y tiene muy poco que se mudaron aqui. Son muy reservados, casi no le hablan a nadie y al parecer llevan una vida del tipo alternativo. Eso creo yo porque tienen un coche de esos raros que funcionan con energía solar y sus hijos no les permiten jugar con cosas plásticas, electrónicas ni nada que sea automático; de hecho tampoco les permiten convivir con los demás niños de la cuadra y se la pasan jugando solo con la madre.

Ya me desvié, comentaba que luego de unos cinco minutos de haber quedado sentada en el coche, bajé y fuí a abrir el buzón para sacar el correo. El estaba ahí, parado viéndome con una mirada como de súplica y molestia al mismo tiempo, sentí preocupación. Me saludó muy correctamente y enseguida soltó la bomba: me pidió por favor tener más cuidado al manejar en la cuadra, me dijo que siempre iba a muy alta velocidad y que por la seguridad de sus hijos él estaba dispuesto a hacer cualquier cosa. Me explicó que a veces los niños salen corriendo de su casa y que si en un momento de mala suerte yo iba pasando tan rápido 'como es su costumbre' aquello iba a terminar en una tragedia. Una vez terminado su monológo, muy amablemente le contesté que estaba bien, que iba a tener más cuidado en el futuro. No se qué pensó el muchacho, tal vez esperaba una disculpa o una justificación de mi parte, pero en seguida volvió a repetirme todo su 'speech' como si yo no hubiera entendido. Otra vez volví a contestar 'ok, lo voy a tener en cuenta' y por tercera ocasión repitió lo mismo. Yo me quedé callada y esperé a que se despidiera, todo transcurrió dentro de lo políticamente correcto aunque yo me quedé un poco fuera de onda porque esas fueron las primeras palabras que cruzamos en por lo menos dos años que tienen de vivir aquí.

Con lo obsesiva que soy, pensé en aquel incidente el resto del día, recordé las palabras de mi marido hace años cuando me dijo que si seguía yendo por el lado contrario de la sociedad, seguría chocando una y otra vez con todo el mundo. En aquel entonces decidí ser más comprensiva con el país que me dá asilo y más respetuosa de sus costumbres, de su cultura. Pensé que desde entonces a la fecha no lo había hecho tan mal, porque los problemas disminuyeron en cantidad y me sentí un poco más adaptada, más relajada y más tolerante. Por eso me afectó un poco la situaciónd el vecino y pensé que había cometido un error de nuevo, me autoflagelé mentalmente sintiéndome culpable una vez más por ser la transgresora a la que el resto del país tiene que educar.

En los días siguientes, puse más cuidado en mi forma de manejar, y fué ahí donde me dí cuenta que no era verdad lo que mi vecinito me había reclamado tan educadamente. No se necesita ser un genio de la física, para saber que aquello era imposible, me explico: la casa de mi vecino está a menos de 15 metros de la salida de nuestro garage, por lo que resulta impensable que yo pueda acelerar mi coche de cero a... digamos a 60 kms/hr en esa corta distancia. Ahora bien, viéndolo del lado contrario, la privada en la que se encuentran nuestras casas proviene de una de las calles principales del pueblo con algo de tráfico, yo tengo que parar mi coche para poder dar vuelta, arrancar en primera y entrar en la calle. Se aplica el mismo princpio de la física, de la esquina a la casa de mi vecino hay un poco más metros que mi cochera, serán unos veinte metros. Igualmente no se puede acelerar un vehículo en un tramo de veinte metros, de cero a 60 kms/hr por llamarlos 'alta velocidad' como él dice. Simplemente no checa.

Yo también tengo hijos, también crecieron en éste barrio y a mi tampoco me gusta hacer a nadie lo que no me gusta que me hagan. Esto él no lo sabe, porque no me conoce, pero en más de una ocasión me ha visto jugar no solo con mis hijos en la calle, sino con todos los niños de los demás vecinos y el trato amable que todos ellos reciben de mi.

Unos días después, coincidí con otra vecina y me comentó que el mismo vecino le había dicho algo parecido respecto a su forma de manejar. Ella si discutió el asunto con el hombrecito, y luego de dejarlo sin argumentos salió el peine: él le comentó su molestia por el uso excesivo que le damos a los autos, cosa que para él está mal porque contaminamos el ambiente y utilizamos recursos no renovables (el combustible) que en un futuro podríamos lamentar. Le dió todo un mini-curso ecológico y pedagógico cuestionando la clase de educación que le estamos dando a nuestros hijos al vivir tan apegados a la tecnología y la forma en que olvidamos los recursos naturales, etc etc etc. De hecho sugirió que todos deberíamos utilizar vehículos de energía solar, como él.

Ahora tengo sentimientos encontrados, ya no sé si la imprudencia es mía o del vecino. Por una parte tiene razón en sus pensamientos ecológicos, pero por otra el hecho de ver 'moros con trinchetes' donde no los hay, no habla muy bien de él. Si bien es cierto que en teoría lo ideal sería que todos viviéramos como ellos y que su labor de convencimiento es muy loable en pro de un mundo mejor, también es cierto que cada cabeza es un mundo y lo mejor sería respetar la ideología individual sin obligar al cambio a base mentiras o alucinaciones. Me da cierta pena el pobre, porque según su forma de ver el mundo, seguro ha de sufrir mucho.

Ciao ragazzi!.

P.D. Si, ya lo chequé con el velocímetro, yo manejo a un promedio de 20 kms/hr cuando salgo o entro en la cuadra. Pos éste!

8 comentarios:

Janei dijo...

Hola! Es la primera vez que dejo un comentario, tengo ya unos mesesitos leyendo tu blog, porque me gusta la manera en cómo ilustras con palabras cómo se vive fuera de nuestro hermoso país... al igual que tú yo ya tengo unos añitos fuera y tengo también la fortuna de poder experimentar esos choques culturales. Y digo afortunadamente porque en verdad es un privilegio ser capaces de notar cúan diferente se ve la vida en dos lugares distintos... Además que me sentí un poco inspirada por el post de hoy... también suelo ser obsesiva en ese aspecto, de darle vueltas y vueltas a situaciones como esa... Ay de aquellos que van de la vida de educadores, verdad? No se toman el tiempo para disfrutarla de verdad... tú ni te acongoges... fuíste más que prudente al no caer en su juego de palabras... recibe un fuerte abrazo... y gracias por deleitarnos con tus historias... tienes una hermosa familia... saludos!!

Nancy dijo...

Keru como ya nos los has contado en otros post, parece ser que la gente allá está tratando de educar a los demás y con mucho más ahínco a los extranjeros, creo que aunque a sus palabras respecto a la ecología tienen razón, todavía esas tecnología no llegan en una cantidad importante a las masas, y no por usar lo más común, quiere decir que uno sea malo o que esté equivocado, simplemente se usa lo que se tiene a la mano y punto.

Respecto a que manejas mal, yo he andado contigo y eres una persona que sabe donde poder pisar el acelerador y donde no... si algo noté es que estás siempre pendiente de no cometer infracciones y que en la entrada a tu cuadra es como mencionas, imposible ir a alta velocidad... como bien mencionas, el asunto iba por otro lado, y pues si, tu vecino ha de surfir mucho rodeado de tanta gente "no civilizada" como el...

Ya lo dijeron por ahí alguna vez, Live and let die... no??

Un abrazote!!

kerubin@ dijo...

@ Janei: Bienvenida, que bueno que te animaste a comentar y gracias por el cumplido!.

@ Nancy: Tienes razón, vivo muerta del miedo de cometer una infracción porque ya me ha pasado y eso si que duele mucho en la cartera. Besitos! Te estoy esperando desde yaaaa!!!!

cocogu dijo...

Hola buenos dias.

Como tu dices hay que ser tolerante por que siempre va a ver 3 verdades

MI verdad
SU verdad
Y la verdad.

Eso me ha ayudado mucho :D

Saluditos.

Anónimo dijo...

Hola Keru. Me quedé pensativa con tu post. Creo que la tirada de tu vecino más bien era imponerte su estilo de vida y/o ideología. Si vieras qué problemas tengo con mi vecina de a lado, me he dado cuenta de que imita muchas cosas que hago pero se aburrey las deja, se nota su frustración y busca echarme pleito(como si yo fuera responsable). Lo bueno es que tengo la opción de cambiar y no dejar que me afecte, en todos lados se cuecen habas...Hasta la vista. Luna Llena

kerubin@ dijo...

@ Cocogu: Además, como dice mi marido, hay que hacer oídos sordos a lo que no vale la pena. No crees? Saluditos!

@ Luna Llena: Yo creo que muchas veces nuestras actitudes, sin quererlo, hacen ver a otras personas una deficiencia suya. Lo que puede provocar ataques envidia, eso lo que yo pienso que le pasa a tu vecina. Gracias por la visita!

Anónimo dijo...

Oye !!!! PADRISIMO EL NUEVO LOOK!!! FELICIDADES !!!!
Salvador desde Ags.México

kerubin@ dijo...

Muchas gracias Salvador, bienvenido a los comentarios.