mayo 05, 2009

Otra de vaqueros

Definitivamente esta no esta siendo mi semana, apenas es martes y ya llevo dos incidentes tan desagradables, que no me imagino como vaya a terminarla. Ayer casi me caigo por las escaleras y, en mi afán por no golpearme contra los escalones, hice tal esfuerzo con mi cuerpo que me provoqué una lesión en los ligamentos y músculos de mi hombro izquierdo. Eso sin contar el tremendo raspón en mi brazo derecho que me hizo perder la piel en una herida de 2 cms de ancho por 15 de largo, me quedó la carne viva... super ouch!!!. El dolor, inimaginable. Ya estuve con el doc, me dió algunos analgésicos y desinflamatorios para el hombro, pero no me voy a escapar de la fisioterapia cuando baje la hinchazón. Eso dentro de una semana, según sus cáculos.

El de hoy estuvo más aparatoso aunque nada que ver con dolor físico, más bien con una torcedura de tripas por toparme con un energúmeno chofer de trailer. Salía de la tienda de la gasolinera con Zara, el trailer (de dos remolques) estaba estacionado al lado derecho de nuestro coche y al pasar justo por enfrente el condenado hombre encendió el motor haciéndonos dar un salto del susto con tremendo ruidazo. Apenas subirnos al carro, sin darnos tiempo a colocarnos los cinturones, bajó hecho una furia a decirme con insultos y gritos que me moviera porque no lo dejaba pasar, le hice la seña de que me diera unos segundos pero parece que o no entendió, o me quiso 'educar' como es la costumbre aquí. Avanzó el vehículo girando hacia la salida pero solo pudo conseguir bloquear mi auto con el primer remolque, ya que el segundo quedó a unos centímetros de la polvera derecha de mi carro.



Nerviosa de que me pudiera chocar, traté lo más rapído posible de cerrar mi cinturón y encender el motor para hacerme hacia atrás y dejarlo ir, pero antes de terminar ya se había bajado de nuevo dirigiéndose hacia mí con cara de demonio más enfurecido y me abrió mi puerta. Sus gritos eran todavía más fuertes e insultantes "te mueves porque te mueves, te dije que yo tenía que salir primero porque estoy trabajando, vieja floja!!!". Yo no podía creer lo que estaba pasando, entré en pánico y más cuando Zara comenzó a llorar, la niña se asustó peor que yo y eso me dió valor para bajarme del coche también gritándole fuera de mí "por qué me abres la puerta??!! eso es una agresión!! quien te crees??? le voy a hablar a la policía!!!. Entre risas, burlándose de mi a lo descarado me contestó que si, que le hablara a la policía y que la que iba a quedar mal iba a ser yo. No me importó, le marque a la policía y le comenté lo sucedido a la señorita que me contestó. Después de escuchar mi versión me pidió hablar con el animal ese, se lo pasé pero esa fué mi ruina, el muy estúpido le dijo que no había ningún problema porque yo simplemente no lo dejaba salir del establecimiento, que bien podía yo mover mi coche un metro hacia atrás para que pudiera salir él y que yo solo buscaba crear dificultades con mi terquedad. Mientras, yo tomaba fotos de la situación.

A esas alturas había salido la cajera de la tienda y junto con otro cliente me gritaban desde la puerta que moviera mi carro, que era una injusticia no dejar pasar al 'pobre hombre' que tenía que seguir con su trabajo. Claro, ninguno de los dos vió lo que pasó al principio ni las cosas que me gritó ni como trató de bajarme del carro. Chin!. El susodicho me pasa el teléfono y para acabarla de rematar, la policía me regaña porque era yo quien estaba obtruyendo el trabajo del infeliz aquel. Con la tortilla volteada y la impotencia de no poder probar la agresión de la que fuí víctima, no pude más que moverme y terminar con todo aquello. Al final, el imbécil tuvo razón, la que quedó como una idiota fuí yo.

Hace rato hablé a la empresa, me contestó el jefe de los choferes y me dijo que estaba enterado del incidente pero lo que él sabía era muy diferente a mi relato. Me aseguró que hablaría con la persona en cuestión para llamarle la atención y ahí quedó todo. Ni hablar, no me gusta el papel de víctima, pero esta vez me tocó perder aunque la razón haya estado de parte. Mi mala suerte hizo que nadie estuviera presente para corroborar lo que en realidad pasó. Y que quede bien claro que estas cosas suceden no solo en Suiza, en cualquier parte se topa uno con gente sin educación ni respeto a sus semejantes. He dicho.

Saludos!

3 comentarios:

Abigail dijo...

Ahhhh
qué coraje con esta gente!!!
sobretodo los empleados de la tienda que salen a decirte de cosas sin siquiera haber visto lo que sucedió...
y que descaro del tipo de haberte abierto la puerta del auto!!!...

está bien.. calmémonos.. porque nomás de leerte ya me dio mucho coraje...

por lo menos tu y zara están bien, no hubo accidentes ni nada por el estilo...

que gente deberas!

saluditos desde mty....

yo dijo...

que poca del energúmeno ese...porqué los camioneros son así?..a mi me ha pasado 2 veces que se estacionan como se les pega la gana o quieren pasar por calles angostas y si uno les reclaman se creen los dueños de la calle y nos dan la gritada...por unos pagan todos...oye Keru, espero que los ligamentos del brazo se recuperen muy pronto y mucha paciencia con la fisio, vas a ver que después quedarás como nueva...un beso

Unknown dijo...

Te estacionaste exactamente donde no debes.

Alli al lado de la tienda debe haber verdaderos lugares para estacionarse. Este no lo es. No esta marcado.