diciembre 20, 2006

Por quien merece amor

Caminaban a paso lento un poco mareados por los alcoholes, la música, el humo de cigarro y el bullicio de aquel local de Canto Nuevo tan popular. No era raro que, después de un sábado de juerga, antes de bajar del auto de Teo, todavía se quedaran platicando un buen rato a esas horas de la madrugada en la entrada de la casa de Mary. Esta vez fué diferente, aunque durante la noche nada le hiciera sentir a ella que ocurriera algo, su mirada triste y lejana la hizo preocuparse.

Extrañamente, Mary no preguntó por los planes para el día siguiente, estaba a la expectativa porque sabía que algo le quería decir. No se equivocó. Empezó hablando de lo que había cambiado su vida desde que se hicieran novios, de lo contenta que estaba su familia desde entonces porque según ellos, ella lo había devuelto "al buen camino" y de lo mucho que la quería. Después de esta frase escuchó por vez primera, después de un año y medio, un "es más, te amo". Pero no se sentió feliz, la cara y las lágrimas de Teo le decían que era un adiós.

Y así fué, muchas razones le dió para explicar por qué precisamente el darse cuenta que la amaba, era el momento justo de separarse. Ella no entendió, pero respetó y se fué de su vida para siempre amándolo como el primer día.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, el coro de 7:00 PM de San Juan Bosco anda buscando a un Teo (en Monterrey, NL Mexico) que nos dejó su teléfono equivocado y dijo que quería entrar al coro. Si estás hablando del mismo Teo de tu relato, le puedes decir que lo estamos esperando con su cello. Gracias y buena suerte!

carol dijo...

y ya es toda la historia ??? wtf???