julio 10, 2006

EL CODIGO DA VINCI: el libro

El año pasado, compré „El Código Da Vinci“, lo empecé varias veces, pero siempre terminaba a las 20 páginas, aburriéndome.

Hasta se lo presté a un amigo, pensando que ya tenía pretexto para no leerlo. Para mi sorpresa me lo devolvió una semana después, precisamente cuando las notas priodísticas hablaban del próximo estreno de la película. Entonces me dije, tengo que leerlo antes para poder compararla con la novela. Otro intento fallido, ésta vez llegué a la página 105 (de 560 aproximadamente).

Pues bien, éste fin de semana, mi marido empezó sus vacaciones, y yo también me dí vacaciones; así que decidí dejarle a mis querubines a su cuidado y, aunque parezca increíble terminé el dichoso “librito”en dos días.

Reseñarlo, sería una tontería, con la película casi ya a la venta, todo mundo sabe de qué trata. Lo que si puedo es, comentarlo:

Es una novela, interesantísima que se ubica y describe lugares reales, incluyendo instituciones tan polémicas como el Opus Dei, la Policía Francesa y un imaginario Banco de Depósitos de Zurich (ahí si no pudo hacer uso del nombre de ningún banco real por temor a ser demandado).


La forma en que se desarrolla, hace parecer que lo que ahí se menciona es verdad, y ésto para aquel que no tenga un mediano conocimiento de lo que es la Iglesia Católica y el Evangelio puede resultar peligroso. La suposición de que Jesucristo tuvo descendencia (su tema principal), no es novedad; muchas de las nuevas “religiones” cristianas atacan al catolicismo basándose en el “engaño” por parte la Iglesia a cerca de ésta teoría. El argumento tan bien planteado de este autor, aunque ficción al fin, hace dudar al lector, con sus rebuscadas explicaciones. Y todo a partir de la obra del maestro Leonardo Da Vinci (ésta es la primera falacia del libro, su nombre es Leonardo di Ser Piero, nacido en una ciudad cercana a Florencia llamada Vinci, de ahí el “Da Vinci”). Para un análisis detallado de las verdades que el libro plantea ver Decodificando El Código Da Vinci.

En mi opinión, el relato es ameno, intrigante, incita a seguir leyendo conforme la trama va avanzando; pero al mismo tiempo está llena de información, muchísima información, que no es posible una lectura fluída sin retroceder en ocasiones a páginas anteriores para entender algunas situaciones. Al menos, mi limitada memoria a corto plazo, no me permitía mantener tantos datos a la vez.

Casi a partir de la mitad, la trama se llena de suspenso, y se mantiene así por muchos capítulos, tantos, que se espera un final digno de tanta imaginación. Pero, oh decepción, parece que el autor al ver tantas cuartillas llenas pensó “Ah caray, mi editor no me va a publicar mas de 800 páginas, a recortar se ha dicho”. Y asi sucede el fin, atropellado, con algunos cabos sueltos y un apretado finalillo rosa. Me quedé con un saborcillo agridulce como cuando México empató con Angola (lo siento, no se me ocurrió otra comparación).

En fin, en general, me gustó que el escritor haya cumplido su objetivo, hacer una novela tan entretenida, que parezca “casi real”. Tan es así que voy a comprar “Angeles y Demonios” novela anterior a ésta, pero según algunas opiniones, igual de buena.







Saludito de Duende, y hasta la próxima.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Las pocas veces que he tenido oportunidad de encender el messenger ¡NUNCA TE ENCUENTRO! quería despedirme de tí, de dejo un gran abrazo y te encargo el changarro, plis

Saludos a tí y a tu viejo

p.d. ¿pa qué compras el libro si lo puedes bajar de interné? ;-)

The_Saint_Mty dijo...

Angeles y DEmonios..es más entretenido que el código, desde mi punto de vista..ajá, tiene razón Lula..el librito susodicho, está en el internet..si acaso lo quieres te lo mando, lo tengo digitalizado...Saludos Kerubin@!