septiembre 13, 2010

Día cero


Hoy es el primer día, del resto de mi vida. Me lo advirtió hace dos meses, me dijó que tenía que tener cuidado, esa fué una llamda urgente de alerta y no lo supe ver. No hice caso. El viernes pasado mi doctor familiar me informó, luego de hacerme otro exámen de glucosa, que ahora si soy diabética.

Lo extraño es que presento muy pocos síntomas, de hecho descubrió los índices un poco altos en el examen general que me hago año con año. Hasta ahora, no me he sentido mal, si acaso solo la visión corta es la que lo delata.

Me quedé helada, no podía articular palabra, agaché la mirada como lo hace un niño después de haber hecho la peor travesura de su vida. "¿Qué hacemos?" me preguntó él como si yo fuera la que hizo el juramento a Hipócrates. ¿Qué diablos iba yo a saber qué tengo que hacer?

Me preguntó si quería tomar medicamento, antes, me dió su opinión de que tal vez fuera el sobrepeso lo que estaría causando "el azúcar" (sic) en mi cuerpo. Me comentó que tal vez si bajara unos 15 kilos en tres meses, aquello se arreglaría, y eso me hizo decidir que seguiría una dieta con ejercicio intensivos sin medicina de por medio hasta el 3 de diciembre en que fijamos la siguiente cita.

No pregunté nada, porque sobre diabetes se lo ídem. A todo lo que me dijo asentí con la cabeza y lo único que recuerdo bien es que me va a canalizar con un nutricionista "especializado en dietas para diabéticos" me dijo. Pero en éste país todo camina sobre patas de tortuga, me imagino que aquella cita con la nutrióloga llegará en, por lo menos, unas dos semanas.

Aquel viernes toqué fondo: me enojé conmigo misma, busqué culpables (y los encontré), sentí pena por mí y al final, acabé como una pequeña e indifensa niña que no sabe qué le espera ante lo desconocido. Deseaba que alguien me abrazara y me palmeara la cabeza con dulzura, que alguien me dijera "no te preocupes, yo te voy a cuidar y te ayudaré a que sanes". Pero no lo hubo, porque simplemente no lo hay.

El maridis me dijo "no puedes pensar eso, tienes 45 años!", y un amigo también pronunció otras palabras tan mágicas como las de mi media naranja "te tienes a tí!!!". Que razón tuvieron los dos.

El sábado tenía invitados a comer y ya tenía el menú casi listo, el domingo tenía el cumpleaños del hijo de mi comanche Carolina. No podía hacer nada, además de que todavía estaba digiriendo la palabreja: DIABETES. Lo único que pude hacer es comer poco, muy poco, en las dos festividades y le di forma a mis hábitos alimenticios (horario y calidad).

Me preparé desde anoche acostándome desde las 11:00 PM. Hoy me levanté muy temprano, mandé a mis hijos a la escuela, me comí un platito de granola con leche light y miel. Inmediatamente me vestí con mi ropa deportiva. Me lancé al gimnasio, precisamente a la hora de la clase de yoga, ya desde hace tiempo tenía ganas de probar y me gustó mucho. Aunque al principio tuve muchas dificultades para los movimientos, antes del final de la clase cesaron los calambres y la flexibilidad volvió a hacer acto de presencia.

Me quedé picada, así luego de una hora de contorsiones inimaginables, bajé a hacer 15 mins. de cycling y media hora de pesas. Por último 10 mins. de sauna. No imaginaba que desde éste primer día tendría retroalimentación, pues decidí pesarme antes de salir del gimnasio y mi sorpresa fué enorme cuando me di cuenta que mi peso es 10 kilos menos de lo que le dije al doctor el viernes pasado. Como no me había pesado hice un cálculo a "lonjas de buen cubero" y pues, exageré. Eso me alegró el día.

En el coche, camino a casa, me comí 6 medias nueces como colación. Más tarde preparé para mi comida una ensalada con lechuga y zanahoria en salsa de yogurt, recalenté un pedazo de carne asada que quedó del finde y me sentí como liberada.

Después de todo no se siente tan mal, al contrario, me siento llena de ánimo y la autolástima que sentí la tiré lo más lejos que pude en el bosquecito que está detrás de mi casa. Leí un poco y, mientras me llega mi cita con la nutrióloga, supe que mi tipo de diabetes es del tipo 2 (del que no se es dependiente de la insulina), que debo comer 5 veces al día y fijar un horario para cada una de ellas y que debo hacer una nueva cita con mi doctor para que me informe más porque tengo muchas dudas.

También quiero dejar de fumar, pero como la recomendación es empezar con sola cosa a la vez, trataré de ir disminuyendo mi hábito gradualmente con la firme intención de dejarlo del todo en el menor tiempo posible. La cosa es no estresarme tanto e ir cumpliendo metas realistas, paso a paso.

El maridis también se puso las pilas, pues me ha estado apoyando comiendo lo mismo que yo. Tiramos a la basura las tentaciones azucaradas que teníamos por default en la alacena y me ha estado dando ideas de comidas con vegetales muy típicos de aquí a los que yo no estaba acostumbrada. Mis hijos también accedieron a olvidarnos por un tiempo de los postres y las frituras.

También he estado pensando en abrir un blog alterno dedicado a los avances en mis propósitos, seguro lo haré más adelante para que me sirva como feedback también.

Después de dos días de la terrible noticia ya no veo el panorama tan negro, pero lo más importante es que aprendí en tiempo récord que aunque pudiera existir algun culpable histórico de lo que ahora me pasa, la única responsable de mi futuro (y mi vida) soy yo. Y lo dicho, manos a la obra, porque hoy vuelvo a nacer.

Que su inicio de semana, sea tan bueno como el mío! Arriba corazones!

Aus Wiedersehen!

7 comentarios:

Margarita dijo...

Querer es poder, Kerubina, y por lo que se lee en tu texto, has empezado bien con la enfermedad, aceptándola y trabajando ya contigo misma. Así que cero tristezas, cero pesimismo, cero latigazos contigo misma, cero depresiones; mejor darle espacio a la disciplina, el entusiasmo y la vida misma, que vale la pena luchar por ella.

Verás que en menos que cante un gallo, esos kilos irán a menos y eso lo irás notando en tu estado de ánimo y tus pensamientos.

Suerte!

albadj dijo...

Animo Keru.. no es el fin del mundo, no eres la primera ni ultima persona con diabetes, mi abuelita desde que yo tengo memoria fue diabetica y murio de viejita..!! el secreto esta en medirte y llevar una alimentacion sana.. mi mamita se agüito mucho al igual que tu cuando le diagnosticaron diabetes, platicamos le dije que es algo con lo que tiene que aprender a vivir, asi igualmente tu, tienes que aprender a vivir con ello..

salu2, un abrazo bien fuerte y un enorme beso :D

Nancy dijo...

Como ya sabes yo tambien tengo diabetes, y aunque al principio es duro de aceptar el "tener" que cambiar ciertos hábitos, al final no es nada mas que vivir de una manera mucho mas saludable, cosa que deberíamos hacer por decisión propia y no obligados por las circunstancias.

Creo que es eso lo que nos hace sentir de algún modo molestos, el sentido de obligatoriedad, pero bueno, las cosas son para mejorar, ánimo Keru!! tu tienes carácter para lidiar con ésto y mucho más.

Un abrazo grande y apapachador :)

Nancy

Unknown dijo...

¡Hola!
Dice la frase que un viaje de mil millas comienza con un solo paso. Te felicito por esa fortaleza ante éste nuevo reto: mejorar tu salud.
El hacer las cosas por una misma trae una satisfacción enorme y estoy segura de que lograrás tu cometido y te sentirás una mujer nueva :)
La autocompasión es peligrosa, es como la depresión: un círculo del que después es dificil salir, has hecho bien en sobreponerte y no dejarte abatir por la tristeza. Seguramente fue un golpe duro al ánimo pero aplaudo tu coraje y te mando la mejor de las vibras.

Un abrazo :)

Helenistica_

kerubin@ dijo...

@ Mag: De todo corazón agradezco tu apoyo tanto aqui como en el MSN cuando te lo comenté, tienes toda la razón!

@ albadj: Ahí está la clave Albiux, en saberse medir, algo que me costará mucho trabajo pero que seguro conquistaré a puros trancazos :-P Gracias por tus palabras.

@ Nancy: Cierto, el sentirme "obligada" a hacer ciertas cosas que no controlo es lo que más miedo me dió, pero ya no hay vuelta de hoja ni tiempo que perder. Gracias por tus apapachos, siempre me confortas Inge! TQM

@ Maria Elena: Al menos solo me costó dos días dar el primer paso, y si, la autocompasión rompe con cualquier esquema; algo que no pienso permitir. Bienvenida "niña" (esposa de mi niño mexico-franchute) a este espacio y gracias por tus ánimos y buena vibra!

Alejandro dijo...

si te hubiera dado un medicamento, el cual previene, la diabetes, siendo que eres propenso a ello, tal vez te hubiera ido mejor, o retrasado la aparición.. de la DM..
Este medicamento es la metformina, que puede darse a pacientes con sobrepeso, u otros factores de riesgo de diabetes, aun y no tengan la predisposicion a DM..
tal como los que quieren perder peso, pues ayuda a disminuir el apetito y mejor la función de la insulina...

ánimo, no todo está perdido, aun así puede tomar metformina ya!
No pasa nada! :D
saludos

kerubin@ dijo...

De veras Alex??? Me interesa mucho eso que me dices, pues como dije en el post, no sé nada sobre la diabetes y su funcionamiento. Me puedes hablar más sobre eso? Te lo agradecería mucho.