Nos encontrábamos ayer en un centro comercial Zara y su servilleta. Hacíamos tiempo mientras Chris terminaba con un compromiso por ahí cerca y se me ocurrió ir a comprar cápsulas de café porque ya se nos estaban terminando. Lo hice rápido y para no ir directo al coche porque todavía teníamos muchos minutos por esperar, le dije a la niña que bajaríamos por las escalera para ver aparadores.
Justo al pasar por una tienda donde suelo comprar ropa, la condenada escuincla se para en la puerta -de más de 3 mts. de ancho- abriendo brazos y piernas para decirme "no entres, no entres, no entres!!!". Y es que les había prometido a ella y a Chris, que luego de recorglo iríamos a que escogieran su regalo -atrasado- del día del niño. Además les había advertido que sería un regalo chiquito, baratito, porque no había para gastar mucho.
Le dije que sólo iba a 'ver', que no nos íbamos a tardar, pero ella que de tonta no tiene un pelo me contestó "no es porque nos tardemos, sino porque si compras algo, nos va a tocar un regalo mucho más chiquitoooo". Condenada huerca!
De todas forma pasamos, ella se fué al departamento de niñas y yo al de niñotas. Por supuesto que salí de la tienda con dos blusas que estaban rebajadísimas, la niña muy prudente se esperó a estar afuera para reclamarme:
La criatura tiene solo casi siete años, que me espera a los quince???
Au revoir!
Justo al pasar por una tienda donde suelo comprar ropa, la condenada escuincla se para en la puerta -de más de 3 mts. de ancho- abriendo brazos y piernas para decirme "no entres, no entres, no entres!!!". Y es que les había prometido a ella y a Chris, que luego de recorglo iríamos a que escogieran su regalo -atrasado- del día del niño. Además les había advertido que sería un regalo chiquito, baratito, porque no había para gastar mucho.
Le dije que sólo iba a 'ver', que no nos íbamos a tardar, pero ella que de tonta no tiene un pelo me contestó "no es porque nos tardemos, sino porque si compras algo, nos va a tocar un regalo mucho más chiquitoooo". Condenada huerca!
De todas forma pasamos, ella se fué al departamento de niñas y yo al de niñotas. Por supuesto que salí de la tienda con dos blusas que estaban rebajadísimas, la niña muy prudente se esperó a estar afuera para reclamarme:
Zara: "Lo sabía, te dije que no compraras nada! Ahora nos vas a comprar cualquier mugre!"
Yo: "Ay Zara, no debiste dejarme entrar a la tienda. Ya ves, ya gasté dinero que no debía, tu tuviste la culpa" -le dije en tono de broma cuando la vi tan seria, siguiéndole el juego.
Zara: "Por esto te dije que no entraras mami, pero no me hiciste caso, eres bien terca" -me dijo en el mismo tono en que yo le hablo a ella cuando la regaño.
Yo: "Si m'ijita, tienes razón, lo que pasa es que soy adicta a las compras, me perdonas?"
Zara: "No mami, no eres adicta a las compras... ERES ADICTA A LA ROPA!!! y tienes que ver a un doctor!!!"
La criatura tiene solo casi siete años, que me espera a los quince???
Au revoir!
2 comentarios:
Qué gusto leerte de nuevo Keru!
Me di una vuelta para saber si tu ausencia había terminado. No te preocupes, que los que somos fieles aquí seguiremos.
Esa Zara es tremenda! Muy bien para que no se la tranzen, jejeje
Besos y abrazos a todos paisana y amiga querida!
Bebita
A los quince te espera que ella tenga la misma adiccion jeje la mayoria de la mujeres cojeamos de la misma pata :)
Saludos Keru, me encanta leerte
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