Ayer por la mañana, después de desayunar con mis hijos, mi maridis y sin mucho qué hacer a esas horas, se me ocurrió ver algunos capítulos de la primera temporada de Dr. House (tengo los DVD's desde hace meses, pero como me hace pensar mucho, solo veo de vez en cuando algunos cuando no hay otra cosa mejor). Estaba por comenzar el segundo episodio de la mañana cuando se me unió mi maridis, el capítulo en cuestión trataba sobre la llegada del padre del Dr. Chase y del rechazo de éste hacia su progenitor. Al final del capítulo, en un acto como de reonciliación por viejas rencillas, Dr. Chase alcanza a su padre al salir del hotel con la intención de regresar a Australia en una escena muy enternecedora. Tanto que, como una señal divina, cautivó a mi media naranja y le hizo reflexionar a cerca de la distante relación con sus padres, inmediatamente me preguntó si me gustaría ir a comer con ellos y si podríamos invitarlos a un restaurant cerca de donde ellos viven. Les llamó, se pusieron de acuerdo y quedamos para hoy a las doce del mediodía.
Mi maridis ama profundamente a sus padres pero su relación nunca ha sido muy cercana, y no por falta de cariño, sino por cuestiones culturales pienso yo. A ellos los vemos poco, con su hermano la cosa es peor pues se hablan cuando mucho unas dos veces al año y solo lo vemos en algunas festividades familiares importantes. Desde que nos casamos, siempre ha añorado un trato como el que ha visto que existe entre los miembros de mi familia: unión, afecto y mucha confianza. Durante la comida estuvimos todos muy amenos y felices, mi suegra (que es la más kinky de los dos) estaba radiante, de muy buen humor y en ésta ocasión nada le pareció mal. Platicamos mucho, comimos otro tanto y para rematar los invitamos a la casa para tomar el café. Fué un día bonito para la familia, mis hijos también lo disfrutaron y yo ... yo me olvidé por completo de todos los malos entendidos y malas leches de ellos hacia mí en tiempos pasados. Me relajé tanto y me porté tan comedida, que mi propio suegro me agradeció muy amablemente la invitación y el rato que pasamos.
Siempre he pensado que la felicidad no es una meta que se consigue y se conserva, sino momentos intermitentes durante la vida que hay que aprovechar y atesorar cuando se presentan, con le esperanza del siguiente que vendrá. Hoy mi orgullo y mi dignidad quedaron a un lado, cosas que son muy importantes para mí, pero que valen mucho menos que ver la sonrisa de satisfacción de mi maridis y la alegría que sus abuelos brindan a mis hijos; que, dicho sea de paso, los adoran también. Este período de mi vida es uno de los más hermosos que he vivido desde hace tiempo, las cosas con mis vecinas están casi solucionadas y mi familia de Monterrey también está en óptimas condiciones. Por si fuera poco, el viernes tuve mi primera sesión de control de mi Programa de Nutrición (ojo: no es dieta, al menos así lo dice mi entrenadora/nutrióloga) y los resultados no pudieron haber sido mejores. Bajé cuatro kilos, si ya se que parecen pocos, pero lo más gratificante es que de medidas bajé por lo menos cuatro centímetros en cada una y en las que más perdi seis! Aunque tengo que confesar que éste mes de viajecillos y cumpleaños multitudinarios no ayudó mucho, pero me voy a aplciar más en sucesivo sin tantos compromisos "gastronómicos".
No quiero pensar en futuros problemas, ni siquiera en cómo o cuál será el siguiente, solo quiero disfrutar de ésta etapa en la que las cosas parecen irse acomodando de la mejor manera en casi todos los aspectos. Viva la familia!
Ciao ragazzi!
Mi maridis ama profundamente a sus padres pero su relación nunca ha sido muy cercana, y no por falta de cariño, sino por cuestiones culturales pienso yo. A ellos los vemos poco, con su hermano la cosa es peor pues se hablan cuando mucho unas dos veces al año y solo lo vemos en algunas festividades familiares importantes. Desde que nos casamos, siempre ha añorado un trato como el que ha visto que existe entre los miembros de mi familia: unión, afecto y mucha confianza. Durante la comida estuvimos todos muy amenos y felices, mi suegra (que es la más kinky de los dos) estaba radiante, de muy buen humor y en ésta ocasión nada le pareció mal. Platicamos mucho, comimos otro tanto y para rematar los invitamos a la casa para tomar el café. Fué un día bonito para la familia, mis hijos también lo disfrutaron y yo ... yo me olvidé por completo de todos los malos entendidos y malas leches de ellos hacia mí en tiempos pasados. Me relajé tanto y me porté tan comedida, que mi propio suegro me agradeció muy amablemente la invitación y el rato que pasamos.
Siempre he pensado que la felicidad no es una meta que se consigue y se conserva, sino momentos intermitentes durante la vida que hay que aprovechar y atesorar cuando se presentan, con le esperanza del siguiente que vendrá. Hoy mi orgullo y mi dignidad quedaron a un lado, cosas que son muy importantes para mí, pero que valen mucho menos que ver la sonrisa de satisfacción de mi maridis y la alegría que sus abuelos brindan a mis hijos; que, dicho sea de paso, los adoran también. Este período de mi vida es uno de los más hermosos que he vivido desde hace tiempo, las cosas con mis vecinas están casi solucionadas y mi familia de Monterrey también está en óptimas condiciones. Por si fuera poco, el viernes tuve mi primera sesión de control de mi Programa de Nutrición (ojo: no es dieta, al menos así lo dice mi entrenadora/nutrióloga) y los resultados no pudieron haber sido mejores. Bajé cuatro kilos, si ya se que parecen pocos, pero lo más gratificante es que de medidas bajé por lo menos cuatro centímetros en cada una y en las que más perdi seis! Aunque tengo que confesar que éste mes de viajecillos y cumpleaños multitudinarios no ayudó mucho, pero me voy a aplciar más en sucesivo sin tantos compromisos "gastronómicos".
No quiero pensar en futuros problemas, ni siquiera en cómo o cuál será el siguiente, solo quiero disfrutar de ésta etapa en la que las cosas parecen irse acomodando de la mejor manera en casi todos los aspectos. Viva la familia!
Ciao ragazzi!
3 comentarios:
Keru que bonito que hayan tomado la desición de convivir con tus suegros y muy sabio de tu parte dejar todos esos sentimientos que no favorecen la relación con ellos de lado, me enorgullezco de ti una vez mas, eres una persona muy valiosa, con un corazón enorme :)
También me da gusto por tu maridis, y si el no tiene algo que tu si, y sabes como lograrlo, tal vez ha llegado el tiempo que le compartas algo de la cultura mexicana, y tal vez a través de eso puedan todos ellos lograr algo tan bonito como es la convivencia con los seres que amamos..
Te felicito y deseo que esos momentos se repitan, que la paz que percibo en tu vida en estos momentos, sea duradera o al menos algo recurrente como dices, y que sean muchos esos momentos de sana alegría...
Y no.. no pienses en el futuro, ese ni siquiera existe aún...
Te mando un abrazote a ti y a toda la familia Kerubina
Besos
Nancy
P.D. Felicidades por tus logros en el programa!! creeme que comprendo tu alegría, es un logro a base de mucho esfuerzo :)
Keru
Felicidades por tus logros! guauuu
y también por lo de tu familia. Que bueno que la pasaron tan bien y que disfrutaron del momento sin pensar en cosas lastimosas del pasado. Yo creo que por algo estás aquí, haciendo que conozcan otro tipo de relaciones familiares. Y haces muy bien en pensar solo en hoy...mañana...Dios dirá.
te mando un fuerte abrazo
@ Nancy: Ya tenemos un buen de tiempo viéndonos con regularidad, pero las cosas siempre habían sido solo "cordiales". Lo de hoy fué maravilloso, tanto, que no me acordé de nada del pasado. Totalmente enterrado.
@ Ivi: Si, como la filisofía de AA "solo por hoy", al menos a mi me ha estado dando resultado en algunas otras cosas. Saluditos.
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