Y para muestra basta un botón...
En mi primer post comentaba a cerca de como se las gastan los "reyes del queso" (leáse suizos) en relación a los extranjeros que vivimos por estas tierras. Empezando por el principio, les comentaré que los extranjeros en suiza somos una minoría importante, casi igual que en USA, la mayoría trabaja más y mejor, por menos Francos Suizos (moneda oficial). Aunque los latinos somos relativamente una cantidad significativa, no somos gran cosa, la mayoría de los "aliens" provienen principalmente de Europa (italianos, españoles y sobre todo de países en conflicto como Serbia y Montenegro, Albania, o países subdesarrollados como Turquía y La India). Peeeero para "los primos de Heidi" todos somos unos cochinos extranjeros, que solo llegamos a ocupar puestos de trabajo que no nos corresponden, o a desestabilizar su "hermosa y ancestral" cultura, manchándola con nuestras cochinas costumbres extranjeras.
Y para muestra basta un botón, el pasado mes de febrero en la ciudad de Zurich, el sistema de transporte colectivo (autobuses y tranvías) colocó en sus unidades, carteles de lo que era el principio de una campaña de higiene y buenas maneras (?) dentro del transporte urbano. Dichos carteles solo contenían símbolos prohibitivos* en los que se invitaba a no cantar, a no pedir limosna, a no tirar basura, no subir los pies en los asientos, etc. Y adivinen cuál imagen usaron para visualizar la prohibición de cantar???? Nada menos que ésta:
Les dice algo esta figura? O es que los mexicanos radicados en Quesolandia sufrimos paranoia?
Pues aqui no acaba la cosa, resulta que la Embajada de México en Suiza recibió tal cantidad de llamadas de protesta por la citada publicidad, que emitió un comunnicado oficial en el cual "...solicitó a la Administración de Transportes de Zürich el retiro inmediato de la campaña que utilizaba el estereotipo de un mariachi, para prohibir las actividades musicales en el transporte público". (Comunicado de prensa No. SUI-003/2006)
Por supuesto que los presuntos responsables, trataron de echarle la bolita a los de la agencia de publicidad que contrataron para dicha campaña, pero de nada les valió la "barra" tan chafa que econtraron, así que, su chistecito les costó casi 20,000 Francos Suizos (aproximadamente unos 170,000 Pesos Mexicanos) y casi una semana "en chinga loca" en quitar los dichosos cartelitos y poner nuevos. He aqui la evidencia:
Estos son los nuevos carteles, el tercer símbolo de izquierda a derecha es el que prohibe cantar, pero ya no es un "charrito".
Como verán (por aquello del tema tan actual de los inmigrantes en USA) en todas partes del mundo "se cuecen habas", y para muestra he aqui un botón.
Ahí se los dejo de tarea.
Ciao
* En Europa, los símbolos prohibitivos son todas aquellas conductas visualizadas dentro de un círculo rojo, contrariamente a los usados en América en los que el círculos lleva una linea transversal.