Un año más

Hoy me he dedicado a flojear, me siento como princesa de las mil y una noches, desde en la mañana mi maridis me llevó el desayuno a la cama, preparó la comida, cuidó de los niños y por si fuera poco limpió la cocina y me pintó el cabello. Mis hijos desde temprano me despertaron saltándome encima, recogieron su cuarto y además se han portado super bien todo el santo día. Se puede pedir más? Y aunque ésto suele suceder sólo una vez al año, se disfruta como si no fuera a ocurrir nunca.

El teléfono no ha parado de sonar, llamadas de éste y del otro lado del charco, una amiga me trajo mi pastel favorito sin siquiera avisarme. En fin, faltan unas pocas horas para terminar el día y preparar todo para la semana que ésta vez para nosotros empieza mañana, y no quisiera que terminara nunca. Que linda es la vida, con sus problemas y todo, pero días como hoy hacen que se me olviden y que agradezca el estar en este mundo durante tantos años, bueno los suficientes para poder ver la vida de ésta forma. Adivinan el por qué?

Feliz inicio de semana!