Jueves negro ... y día internacional de la mujer?

Qué manera de empezar mi día, yo ni me acordaba que hoy se celebraría internacionalmente a las féminas de éste planeta, desde las 8:30 am con las tripas hechas un nudo (recuerden que el día empieza siete horas antes en ésta lado del charco). Les cuento: ésta mañana me dirigía al súper a hacer la compra semanal, de pasada, llegué a la tiendita de la gasolinera cercana a mi casa para comprarle a mi nena un chocolate con leche para que fuera desayunando en el coche. La gasolinera cuenta con 5 bombas, mismas que nadie estaba utilizando, los cajones de estacionamiento para los que solo vamos a la tienda estaban todos ocupados así que me estacioné en la primera bomba, asegurándome de dejar espacio por si a algún idiota se le antojaba cargar en ella aún estando las otras cuatro libres.

No me equivoqué del todo, apenas nos bajamos mi criatura y yo, cuando llega una señora ya mayor en su coche y se estaciona precisamente atrás del mío. Tontamente pensé que ella también iría solo a comprar algo, porque no había razón alguna para no cargar gasolina en cualquiera de las otras bombas. Tranquilamente hice mis compras, ayudé a la niña a subirse al coche, le abrí el chocolate, le puse el cinturón de seguridad, etc. todo sin fijarme que dentro del auto de atrás todavía estaba la bendita señora esperándome. De pronto veo que un señor se baja de un camion estacionado en uno de los cajones que, para entonces ya se habían desocupado, se dirige a mi diciendo no sé que tantas cosas. Bajé la ventanilla, y sólo escuché regaños: "Señora, no ve que alguien la está esperando a que se mueva y usted no se dá prisa? Esté lugar es sólo para cargar gasolina, sólo a una ignorante como usted se le ocurre dejar su coche ahí para ir a comprar no sé cosas en la tienda! GGGRRRR!!!!!!!!

Se me subió a la garganta el único jugo que mi estómago almacenaba: el gástrico! Pero tragándome mi coraje, muy elegantemente le contesté:

Yo: Usted tiene un problema conmigo?
El: No, yo no, pero la señora que está estacionada atrás sí!
Yo: Pero, yo le estoy ocasionando un problema a usted?
No: No, a mi no ya le dije
Yo: Entonces deje que ella me lo diga y por favor ya cállese!

No me iba a poner a explicarle las razones por las que me había estacionado en ese lugar, faltaba más. Me fuí ya con el día amargado.

Por si ésto no fuera suficiente, al mediodía llevé a mis hijos a comer a McDonald's, y por otra maldita coincidencia al momento de estacionarme, también lo hizo un camión de una empresa que coloca yeso en las construcciones. Se bajan tres muchachos no mayores de 25 años, dos de ellos sin el uniforme típico de ese oficio (en éstos ranchos cada oficio tiene un tipo de uniforme en particular), vestidos con ropa sucia del yeso pero de color negro, botas Doc Martin y las cabezas rapadas. Efectivamente, los típicos Skinheads nazis, tan temidos por todos los extranjeros latinos; el tercer joven en cuestión se veía normal y hasta llevaba el cabello largo recogido en una coleta.

Como ya hace algunos años leí un libro sobre un estudio de campo de éstos grupos, no quise buscarle tres pies al gato, y me hice loca bajando a mis hijos del coche para dejarlos ir. Pero no les no les pasé desapercibida, caminando detrás de ellos, él más corpulento le dice algo a su compinche por lo que voltean los dos a vernos y se ríen a todo pulmón en mi nariz. Yo trataba de caminar despacio, poniendo la mayor distancia entre ellos, pero en la fila ya dentro del local tocaron enfrente mío.

Siguieron riéndose, está vez si puse atención a la última frase: "... mira, después de ser un animal negro, todavía se viste ese color". Yo llevaba una blusa y un pantalón negro, aunque mi color de piel no es marcadamente oscura que digamos. Las personas alrededor también escucharon haciéndoles muecas de desaprobación ante tal insulto, yo los veía directamente a los ojos como retándolos, no iba a dejarlos darse cuenta del miedo que hacían temblar a mis manos y piernas. Cuando el grandote recibe la charola con su orden, pasa por donde yo estoy y me dice con voz muy enérgica "Quítate!", yo ni pestañeé ni me moví y siempre mirándolo a los ojos fijamente. Lo repitió unas dos veces más hasta que un señor de la fila de al lado le dice "pasa por acá, o lo que quieres es molestar a la señora?". La muchacha de la caja le dice amablemente "por favor muévase por éste lado, que hay mucha gente esperando".

Tal vez amedrentó por la actitud de la gente, pero se fué a sentar precisamente en la mesa de enfrente en la que estaban mis hijos. Sobra decir que ya a éstas alturas yo sudaba a mares, temiendo que algo les hiciera a los niños. Cuando fuí a sentarme pensé en cambiarnos de mesa, pera ya estaba todo lleno; luego pensé pedir una bolsa para la comida e irme a mi casa con mis hijos, pero igual me dió miedo que me alcanzaran en el estacionamiento. A éstas alturas ya uno no piensa cosas coherentes, la verdad es que estaba muerta de miedo.

Después de unos minutos, comenzó de nuevo a decir no sé que cosas en voz alta y volteaban él y su amigo a vernos para reírse. Yo ya estaba al borde la histeria y cuando quise sacar mi teléfono para hablarle a mi maridis para saber qué hacer, me doy cuenta que lo dejé en el carro. Inmediatamente salí corriendo por él, aprovechando que los animales éstos estaban comiendo todavía, llego y me siento al momento de abrir el teléfono para marcar y de pronto de paran y se van. Dejaron todo en la mesa, cuando lo normal es que cada quien recoja su basura y la tire en los contenedores. No sé si se fueron porque pensaron que iba a marcar el teléfono, ó porque pensaron que les iba a tomar una fotografía, pero sin quererlo funcionó como táctica para ahuyentarlos.

Tal vez parezca exagerado de mi parte, pero se han visto tantas cosas en éste país, que no temía tanto por mí sino por mis bebés que son mi mayor tesoro. En España incluso han llegado a matar centroamericanos y homosexuales, que son su principal blanco, con brutales palizas en medio de un mar de gente sin que nadia haga nada. Gracias a Dios la gente que vió lo que a mi me pasó hoy, no se quedó indiferente, y no me quiero imaginar lo que hubiera pasado de no haber sido así.

Está largo el video, pero es solo una muestra
de lo que hacen éstos fascistas!

Por último, felicidades a todas las mujeres hoy y todos los días. Y a ver si luego se inventa el Día del Hombre, porque aunque hay sus excepciones también trabajan y se esfuerzan como la mejor de nosotras.

Abur!